La Hepatitis C se cura con voluntad política

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Manifestación convocada en enero en Madrid por la Plataforma de Afectados. Durante los últimos meses un movimiento social bastante inesperado ha surgido en España, el de las personas afectadas por el virus de la hepatitis C. Un problema que, a priori, puede parecer reducido y minoritario pero que, gracias a la visibilidad que ha adquirido, podemos saber que afecta a miles de personas en nuestro país. El detonante: la divulgación de la existencia de un nuevo medicamento, Sovaldi, que podría curar a la mayoría de las personas que sufren esta enfermedad.

En el momento de escribir este artículo, un grupo de personas vinculadas a la Plataforma de Afectados por Hepatitis C cumplían un mes encerrados en el Hospital 12 de Octubre de Madrid. Están preparando una querella contra Ana Mato y han salido a la calle en marchas y manifestaciones en las que han tomado fuerza y han creado sinergias con otros movimientos, como el de la plantilla de Coca-Cola.

Han pedido al Gobierno la aprobación de una partida presupuestaria extraordinaria para que se suministre el tratamiento de última generación –que ya está incorporado al Sistema Nacional de Salud– a la totalidad de las personas a las que se le ha diagnosticado hepatitis C.

Consideran que existe una situación de emergencia para la salud pública en España, dado que hay miles de afectados y cada día mueren doce personas a causa de esta enfermedad. Quieren que se pueda hacer uso de la propiedad intelectual de los fármacos de última generación, sin recibir el consentimiento de los propietarios de los derechos, emitiendo licencias obligatorias que permitan el uso de los fármacos patentados sin el consentimiento de los propietarios de las patentes bajo premisa de interés público.

Además, han creado toda una red de solidaridad: unos a otros se acompañan cuando visitan al médico que les receta las medicinas, van con las camisetas de la plataforma y, en caso que hubiera algún problema, actúan de testigos. “De cara a la querella que están a punto de presentar solicitan al médico que haga un informe con pronóstico y diagnóstico del paciente en cuestión y donde conste que el facultativo considera oportuno que este paciente reciba tal medicación y que no puede recetársela según los criterios establecidos”, explica Ángeles Fernández, miembro de la plataforma.

A pesar de que los centros sanitarios tienen sus consultas colapsadas, los profesionales sanitarios están colaborando con las personas enfermas porque el Gobierno culpa a los médicos por no recetar la medicación. Según la Plataforma, se le debería recetar el tratamiento a todas las personas enfermas de hepatitis C en fase Fase 4.

La hepatitis C se desarrolla en distintos estadíos que marcan las distintas fases, siendo la 1 cuando tienen en su sangre el virus FHC. Éste va atacando el hígado e infectándolo hasta que se convierte en cirrosis, siendo ésta la fase 4. En este nivel no solo es el hígado el afectado sino que los enfermos empiezan a tener fallos renales, varices esofágicas y las encefalopatías consecuencia de la hepatitis C.

Para José Manuel Villa el tratamiento es vital. Tiene cirrosis, varices esofágicas y encefalopatías, pero no le dan el tratamiento porque le falta un punto que no está dentro del programa que este gobierno de Rajoy establece. Se encuentra muy enfermo y sabe que, si fuera por los médicos, le darían su medicación para salvarle su vida pero “es la administración pública la que se lo niega” ya que, según el criterio del Gobierno, para administrársela tendría que estar ingresado. “Lo hacen para ahorrarse el dinero de los medicamentos”, denuncia este paciente.

Otro caso es el de Antonio Plaza, de 51 años, enfermo de hepatitis C con un informe donde su patóloga le da dos años de esperanza de vida ya que el médico le prescribió su tratamiento y la Consejería de Sanidad no lo autorizó. La representante de la Plataforma de Afectados no entiende cómo no se aplica el tratamiento a los pacientes y le parece “una barbaridad que este Gobierno haga esto porque cada día llegan nuevos pacientes a su colectivo denunciando que no les dan la medicación”.

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