Os he dado este pozo para que prosperéis

pag16_movimientos1_web-4.jpgHoy os quiero presentar un bonito proyecto en el que tengo la suerte de participar aquí, en Valencia. Lo llamamos “Rehoboth”. Es el nombre de uno de los pozos cavados por Isaac. Significa “lugar abierto, libre”. Cada encuentro que se tenía con el Señor era marcado con un altar o un pozo. Y a uno de estos pozos se le denominó así, Rehoboth.

Los destinatarios de este proyecto son las personas sin hogar. Quiere facilitar un lugar abierto, donde la persona se sienta acogida y escuchada, un lugar de encuentro, un lugar para prosperar, donde la persona pueda ir saliendo de sus pozos personales, pueda recuperar su autoestima, su dignidad y sus ganas de prosperar.

Dice la cita: “Por fin Isaac se fue de ese lugar y cavó aún otro pozo. Y esta vez no hubo ningún pleito. Por eso Isaac lo nombro Rehoboth “espacios libres,” y dijo, “El Señor nos ha dado este lugar para que prosperemos.” Génesis 26, 22

El proyecto quiere ser un espacio de acogida para personas “si techo”. Un lugar donde descansar un rato, tomar un café o un refresco y encontrarte con alguien que te acoge como eres, si juzgarte y sin exigirte nada a cambio. Es lo que se llama técnicamente un centro de “baja exigencia”. No se pone ninguna condición para entrar (asearse, llevar su mascota, estar ebrio, haber estado anteriormente… no). Únicamente se pide que dentro no se consuma alcohol ni drogas y que no haya ningún tipo de violencia.

Está situado en un local del viejo barrio del Carmen, en el centro histórico de Valencia. Comenzó a funcionar el año pasado por iniciativa de las Hijas de la Caridad, con el apoyo de Obra Mercedaria y alguna otra institución benéfica. Lo sostienen un grupo de voluntarios que dedican parte de su tiempo los fines de semana. Se abre los viernes por la tarde y permanece abierto noche y día hasta el domingo por la tarde.

La crisis en la que estamos sumergidos ha agravado la situación de muchas personas -demasiadas- que están, literalmente, en la calle. Y ahí hacen su vida, si se puede llamar vida a eso, casi siempre en el más absoluto anonimato, sobreviviendo con limosnas y deambulando de un centro a otro en el que satisfacer sus necesidades más básicas.

El proyecto intenta ser el paso intermedio entre el trabajo de calle que ya se está desarrollando desde otros programas sociales y el acceso a recursos más estables que lleguen a promocionar a la persona si esta es su voluntad.

Por otro lado, pretende ser un lugar abierto al que cualquier persona sin hogar pueda acercarse para recibir una atención variada: desde tomar algo caliente, descansar, calentarse, ser escuchado y ser orientado a otro recurso en caso de querer dar más pasos en su integración en la sociedad.

También pretendemos ser un lugar de acogida para aquellas personas cronificadas que es difícil que salgan de su situación, pues en algunas ocasiones se ha convertido en su estilo de vida y no logran atenerse a ninguna normativa. Hombres y mujeres que por distintas circunstancias se encuentran viviendo en la calle, que presentan situaciones graves de abandono personal y que no aceptan acudir a otros recursos de la red por tener dificultades para cumplir con las normas de funcionamiento de los mismos.

El perfil más común de los destinatarios de Rehoboth son personas que viven en la calle y presentan situaciones graves de abandono personal, personas que no aceptan acudir a otros recursos de la red de atención por tener dificultad para cumplir con las normas de funcionamiento. También se trata de personas que no acceden a la red y se encuentran fuera de ella -por desconocimiento de la misma- y personas que han abandonado los procesos de intervención desarrollados en otros recursos de la red o han sido expulsadas de estos recursos, pero que precisan ser retomadas desde un modelo de atención menos exigente.

pag16_movimientos1_web_2_.jpgAlgunas circunstancias que acompañan a estas personas suelen ser un estado de salud precario y falta de relación con los servicios de salud. Sufren grandes déficits alimentarios y de higiene personal y sufren también aislamiento; la soledad es su compañía y que carecen de relaciones familiares y sociales. Carecen de recursos económicos y tienen falta de interés para obtenerlos. Su autoestima es baja y tienen nula motivación hacia el cambio o mejora de su situación. Además, a menudo sufren adicciones crónicas (alcohol, sustancias tóxicas, ludopatía) y graves problemas de salud mental, relacionados en parte con la soledad y aislamiento que caracteriza a este colectivo.

Como objetivo nos proponemos mejorar la calidad de vida de las personas que viven en la calle por circunstancias, déficit o hábitos de vida y que no cuentan con ningún recurso al que acceder.

Foto. Rehobot.Para llevar esto a cabo la asociación se plantea las siguientes actividades:

• Servicios de asistencia, acogida, ayuda, atención y orientación a las personas sin hogar y sus familias.
• Colaboración y coordinación con todo tipo de instituciones públicas y privadas con el fin de resolver los problemas y necesidades de las personas que atendemos.
• Sensibilizar a la sociedad con los problemas y necesidades de las personas sin hogar a través de cursos de formación, campañas divulgativas, promoción del voluntariado etc.

Rehoboth está abierto los fines de semana, desde la tarde del viernes a la tarde del domingo ininterrumpidamente. Para ello se vale de un grupo de voluntariado sensible a esta problemática. Queremos ofrecer una acogida total de su ser reconociéndole su dignidad y dándole la posibilidad de normalizar de nuevo su vida.

Para más información: http://arehoboth.ning.com/

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